[Viaggio] Acumulando visitas y lugares

Esta Pascua recibimos la segunda visita en Italia: Jose Luis y Bea. La verdad es que aprovechamos el tiempo que no veas: toda la vuelta a Lago, buen comer y beber, Suiza, Pavía... Además el tiempo nos respetó y llovió algún ratito pero por la noche.



La cosa empezó con un brindis de Limoncello, quando sono apenna arrivati a l'aeroporto. Así que la cosa pintaba bien. Un aperitivo de los de aquí para que conocieran el lugar y una cenita en la misma pizzeria a la que llevamos a Carlos y Montse, Julias & Benny. ¿Qué pasa?, nos gusta!

El viernes fuimos al Lago d'Orta, cruzando con el Ferry por Laveno y parando a hacernos una birrita en Mergozzo. Ya habíamos estado pero vale la pena repetir una y mil veces. De ahí, como aún había tiempo nos fuimos a Ascona (Suiza) y la verdad es que, para mí, demasiado orden, limpieza y perfección en todo. Pero había unas terracitas en el lungolago que prometían. Decidimos dar la vuelta al lago por arriba, por la poarte siuza, hasta llegart otras vez a Laveno (Italia), donde descubrimos un restaurante - Concordia - (preguntando a los del terreno, ya sabéis cómo se las gasta el Telu) CON CARTA SOLO DE PESCADO!!! Fantástico!! El Telu celebró su cumple con nosotros y se pagó el convit.
Ahí anotamos la frase del viaje: "Abbiamo diventato un paese di merda, ma la pasta e la pizza sono buone ovunque".

El plan para el sábado de Pascua era hacer la ruta por las islas borromeas, y entrar, aún no lo habíamos hecho, al Palacio y los jardines de Isola Bella: precioso. Realmente recomendable. Comimos en la isla de Pescatori y dimos una vueltecilla por Stresa. Cruzamos luego por Laveno con el Ferry y barbaqueue en casa. Había que descansar un poco.

La foto-resumen del viaje ha sido seleccionada por Jose Luis Diago

El domingo era el día más ciudadano y fuimos a la Certosa di Pavia, que nos pareció muy chula y muy bien conservada. Lo que no nos gustó tanto fue la ciudad de Pavía, aunque sí la zona de la universidad. Puede ser porqué el domingo era un día muy de fiesta familiar para ellos y nos costó encontrar un sitio donde comer y las calles estaban desiertas. De ahí pasamos por el pueblo de Vigevano, que nos sorprendió con una plaza muy chula. Y ahí cayó algún gin-tonic, beati voi!

El lunes, último día, lo dedicamos a visitar el pueblo de Ispra, desayunar en la San Gabrielle  y seguir un camino que hay pegado al lago. Por seguir explorando llegamos a la frazione de Sesto Calende: Lisanza,  y ahí también descubrimos un buen restaurante, para despedirnos. A este restaurante tenemos que volver y dedicarle una entrada.

Y para esto es lo que nos dió la visita: hem estat mooolllttt agust!